Fui a ver a Leonie inicialmente por un problema de inflamación a una rodilla. Me agradó ver que no solamente miraba el problema desde un punto de vista anatómico y biológico sino que también se interesó en el aspecto psicológico y a un posible factor psicosomático.
Resultó que mi caso requería una terapia intensiva y Leonie me propuso internarme en su sitio durante 10 días, lo que acepté.
En el tratamiento que desarrolló para mí, Leonie combinó nutrición, fitoterapia, hidroterapia, psicoterapia, ejercicio físico y más, todo esto dentro de un programa ordenado e intenso y, sin embargo, con la justa dosis de tiempo libre cada día para leer, pasear por los jardines y bosques del lugar, y contemplar e integrar lo que estaba viviendo. Leonie hizo todo, desde mis extractos vegetales hasta mis baños de vapor, pasando por mi comida y mis sesiones de psicoterapia o de ejercicio físico. Pasó prácticamente todo el día, todos los días o conmigo o preparando algo para mí…
Tal dedicación me hizo sentir a la vez honrado y humilde y, por supuesto, feliz con los resultados. Terminaba cada día cansado por el día de terapia, listo para un saludable sueño y, a la vez, sintiéndome más ligero a nivel emocional, mental y energético.
Empecé este tratamiento por un problema de rodilla y lo terminé positivamente transformado en muchos niveles, lo cual debo al conocimiento, al profesionalismo, a la fuerza y al corazón de esta mujer. ¡Gracias Leonie!